Hoy, un 2,3% de la población de Chile equivale a inmigrantes en edad laboral. Esto significa un total de 418.600 de personas capacitadas para trabajar en diversas áreas en el país. 

Si bien el desempleo está sobre el 7%, las posibilidades de trabajo para los inmigrantes están en aumento, pero ¿por qué incentivar el contrato de extranjeros? El responsable de Capacitación y Sensibilización del Departamento de Extranjería y Migración (DEM) del Ministerio del Interior, Gastón González, asegura que “ciertas especialidades y talentos vienen de afuera. Promoviendo la diversidad e inclusión, tenemos la capacidad de retener a los mejores, independientemente de su lugar de origen”.

Aramark Chile, empresa de alimentos y gestión de instalaciones, es una de las empresas multinacionales que ha incorporado en sus programas de sostenibilidad la política de inclusión, ya que “la diversidad en el lugar de trabajo siempre es un aporte”, dice Iván Mergudich, vicepresidente de Recursos Humanos y Asuntos Corporativos de Aramark.

La compañía de origen norteamericana cuenta, a la fecha, con un total de 680 empleados extranjeros, los que representan el 4% de sus colaboradores.

Mergudich asegura que “la inclusión da lugar a un ambiente de trabajo que trata a los empleados con integridad y respeto. Consiste en crear una cultura que aproveche las diferencias y las semejanzas para crear un ambiente de trabajo abierto, que fomente y facilite la innovación y que genere un compromiso de nuestros empleados que nos impulse hacia el éxito”.

Para promover la integración, el Consejo de Diversidad de Aramark y el DEM realizan una serie de talleres de sensibilización migratoria a sus empleados, los cuales permiten potenciar el talento dentro de la organización, logrando así captar y potenciar sus capacidades.