La neutralidad es tarea de todos

El cambio climático se ha transformado en el desafío más importante del último tiempo y nos encontramos en un minuto clave para hacer frente a la emergencia en la que, según expertos, nos encontramos. Esto sin duda requiere un esfuerzo sin precedentes tanto de la sociedad civil, las empresas y los distintos gobiernos alrededor del mundo.
¿Cómo podemos responder a este desafío? Durante estos días se llevó a cabo la Cumbre por la Acción Climática de las Naciones Unidas en Nueva York, la que tuvo por objetivo definir acciones concretas y coordinadas contra el cambio climático, comprometiendo a distintos gobiernos a alcanzar la neutralidad para el 2050.
Si bien mucho se habla sobre los grandes acuerdos que las empresas deben construir en términos de emisiones y cómo contribuimos a su reducción, es importante tener presente que todos desde distintos roles podemos aportar con un plan más concreto.
En el caso de Aramark por ejemplo, hace algunas semanas desplegamos como empresa acciones simultáneas a lo largo de todo Chile con el objetivo de generar conciencia medioambiental y social con impacto real en cientos de personas y sus comunidades. Una de ellas fue apoyar con la limpieza de la ribera del Río Mapocho en las comunas de Cerro Navia y Renca, donde fuimos testigos de la cantidad de residuos de todo tipo que estaban entre la basura, aun cuando su naturaleza no lo ameritaba, encontrando por ejemplo junto a otros desechos más de 250 kilos de plásticos PET, cartón, papel y vidrio, a pesar de que estos pudieron ser reciclados en lugar de ser arrojados a la basura.
Entonces, ¿qué nos falta para tener mayor conciencia de la importancia del reciclaje? ¿Cómo podemos aportar desde las empresas para ayudar a que la ciudadanía se concientice y de más valor a estos temas? Existiendo distintas soluciones a estas preguntas una que consideramos relevante es reforzar la educación, a través de talleres y guías simples que enseñen sobre reciclaje, informando a los ciudadanos aspectos prácticos como de qué manera identificar los diferentes materiales, dónde disponerlos, en qué condiciones, entre otras.
Por otro lado, y no menos importante, es imperante adherir a este compromiso global a través de medidas que aporten cambios reales. Por ejemplo, en Aramark reafirmamos nuestro compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas fomentando prácticas responsables con el medioambiente tales como reemplazar las bolsas plásticas por tela. Gracias a esto, se ha evitado el uso de más de 80 mil bolsas plásticas al mes, lo que equivale a una reducción en la emisión de 4,2 toneladas de CO2 al año. También redujimos los plásticos de un solo uso como bombillas y hemos avanzado en el reemplazo de revolvedores plásticos por madera. El conjunto de estas iniciativas nos permitirá evitar la emisión de 90 mil toneladas de CO2 al año.
Se estima que para 2030 los gases de efecto invernadero aumentarán más de un 10% si no se introducen cambios radicales en los patrones de producción y consumo. Necesitamos del compromiso de todos y definir acciones concretas que nos permitan continuar disfrutando de este planeta por mucho tiempo más.
Eduardo Rojas, Presidente Aramark Latinoamérica.